01-07-1992. Se celebra el Día Nacional de Canadá en Expo 92

#expohemeroteca: 1 de julio de 1992

Pabellón de Canadá en Expo 92.

Los canadienses ya eran expertos en lo que a Exposiciones Universales se refiere, como demostraron en Montreal en 1967 y en Vancouver 1986, antes de la Exposición Universal de Sevilla 1992.

En Sevilla presentaron la más avanzada tecnología de exhibición de la época. Bing Thom, arquitecto de Vancouver, había diseñado un pabellón, entre cuyas sorpresas destacó una película impresionante intensificada por el sonido digital IMAX, que incitaba al visitante a descubrir Canadá.

Bandera de Canadá.

Canadá celebró aquella jornada su Día Nacional en la Expo 92, presidido por la ministra de Asuntos Exteriores de Canadá, Barbara Mc. Dougall y el comisario del pabellón Luc Lavoie.

Los canadienses habían realizado una inversión gigantesca tanto en la construcción del edificio, como en repartir parte de esta inversión entre los más necesitados.

Pabellón de Canadá.

Con motivo de su día nacional en la Expo, Canadá invitó a doscientos diecinueve niños, procedentes del colegio <<Nuestra Señora de Guía>> de la barriada de la Pañoleta (Camas), para que disfrutaran de la Expo, acompañados de sus padres.

Los niños de <<La Pañoleta>>, colegio que había adoptado este pabellón, cantaron en el Palenque la canción de <<cumpleaños feliz>> a Canadá, con motivo de los ciento veinticinco años de la existencia de Canadá, creada en 1867.

Entre los actos organizados para celebrar este día, destacaron los diez mil abanicos que se repartieron en el recinto entre los visitantes y los dos mil desayunos, con crepes y sirope de arce, que ofrecieron en el Palenque.

Pabellón de Canadá.

El pabellón de Canadá fue uno de los más visitados del recinto de la Expo porque sus contenidos bien valían la pena esperar, pacientemente, las largas colas de más de ocho horas. La película Momentum, proyectada en una pantalla de veinticinco metros de alto por treinta y tres metros de ancho, fue el principal atractivo.

Quinientos visitantes entraban cada media hora en el teatro Imax, para presenciar el estreno mundial de una de las películas más clara y nítida jamás vista hasta esa época.

Sala teatro del Pabellón de Canadá.

El pabellón de Canadá se sitúa en lo que se denominó Avenida 4 y el Camino de las Acacias, junto al Kangaroo Pub, hasta donde solían llegar las colas de los visitantes que diariamente entraban en este inconfundible pabellón –uno de los más grandes de la sección internacional-.

Las largas colas del pabellón de Canadá siempre recordadas.

El arquitecto Bing Thom, es el autor del edificio de 27,5 metros de altura y cinco mil metros cuadrados utilizables. La principal innovación fueron los dos mil metros cuadrados de láminas de zinc que cubría el exterior, provocando reflejos tanto de día como de noche.

Detalle de la fachada del pabellón de Canadá.

Canadá se presentó en Sevilla con el lema <<Descubra Canadá-Descubra un Nuevo Mundo>> uniéndose así al lema de la Exposición Universal de Sevilla, basada en los Descubrimientos. El segundo país más grande del mundo quiso demostrar su espíritu innovador y la constante ansia que tenían por explorar lo desconocido.

Canadá había decidido afrontar el reto de esta Muestra Universal con ambición y pragmatismo, con una propuesta en la que el visitante fue el principal protagonista.

Interior Pabellón de Canadá.

El recorrido por este pabellón comenzaba en el patio, donde había continuamente grupos cantando y haciendo malabarismos que atraían y distraían a los visitantes mientras aguardaban en la cola.

El <<Patio Pérez>> acogió durante los seis meses de la Muestra a artistas de todo el país, que actuaban sobre un escenario de vidrio flotando sobre el agua. Las paredes estaban recubiertas de agua, combinada con efectos especiales que aludían a la aurora boreal y recreaba un espacio abierto y fresco y con un verde-azulado, que recordaba a los grandes lagos canadienses.

El Patio Pérez acogió durante los seis meses de la Muestra a artistas de todo el país.

El plato fuerte del pabellón es su sala cinematográfica que después de 30 años se sigue manteniendo en buenas condiciones para todo tipo de actos culturales, allí se emitía en diferentes pases el estreno mundial de la película Imax, donde tanto el film, <<Momentum>> como el proyector supuso un avance revolucionaros en el cine.

La película Momentum fue producida por el Instituto Cinematográfico de Canadá y fue la primera rodada y proyectada a cuarenta y ocho imágenes por segundo, produciendo una imagen clara y nítida, realzada por la escala de la pantalla.

El corta-hielo Sir John Franklin en primer plano en la película Momentum.

La película ofrecía a los espectadores un retrato espectacular del paisaje y del pueblo canadiense, en un viaje rápido por todo el país. El corta-hielo Sir John  Franklin aparece en un primer plano, metiéndose casi en la sala y provocando el primer ¡Oh! del espectador.

Zona expositiva de la Columbia Británica en el interior del pabellón de Canadá.

El recorrido por el pabellón continuaba por la sala de exhibiciones permanentes de las provincias de Quebec, Ontario y Columbia Británica, junto a la del Gobierno Federal. El visitante tomaba contacto con Quebec en la primera zona de la exposición a través de un fresco que reproducía las principales etapas históricas del Quebec y su evolución hasta nuestros días.

Zona expositiva de Ontario.

Ontario estuvo presente a través del agua, una de las características más representativas de este país, El toque ecologista demostró la responsabilidad de Ontario con la renovación de los recursos naturales de la provincia.

La Columbia Británica presentó <<La mágica influencia de la naturaleza>> en los descubrimientos y la tecnología.

El Gobierno Federal de Canadá invitaba a los visitantes a adentrarse y explorar este país, recorriendo el llamado <<Canadian Way>>.

 

Y para finalizar el recuerdo de aquella jornada festiva en el recinto de la Isla de la Cartuja, no podemos olvidar otro de los platos fuertes de este Día Nacional de Canadá, ya que este país trajo a una de sus mejores cantante para actuar en su jornada de honor, Céline Dion, que actuó y puso su voz en una de las jornadas más recordadas de la Expo 92.